El pasado mes de mayo se supo Ángel Garó había sido detenido por un presunto delito de violencia doméstica contra la que fuera su pareja por aquel entonces. Tras prestar declaración, el gaditano fue puesto en libertad provisional con cargos.
Casi un año más tarde, la Fiscalía ha decidido pedir nueve meses de prisión para Garó, además de una orden de alejamiento de 100 metros al que fuera su pareja, a su domicilio o su lugar de trabajo.
Garó no podrá comunicarse con su expareja de ninguna manera, especialmente por vía telefónica durante dos años. La decisión la tomará el juez encargado del caso el próximo 26 de septiembre en el Juzgado de lo Penal número 5 de Málaga. Por el momento, la Fiscalía pretende pedir pena de prisión, pese a que la víctima ha renunciado a las indemnizaciones.
En varias entrevistas, el humorista negó los hechos y acusó a su expareja de ser una "persona desequilibrada". "Se ha vilipendiado mi honor. Yo no lo he tocado en mi vida".