Encontrar un piso de alquiler en Valladolid puede ser tarea complicada. El principal hándicap suele ser el precio, pero también influye el número de habitaciones, su ubicación y, por supuesto ,el estado de conservación. A menudo, los estudiantes o algunos jóvenes que dan sus primeros pasos en el mercado laboral optan por alquilar tan solo una habitación para abaratar costes. Pero a veces el precio también es desorbitado y pueden alcanzar hasta los 550 euros mensuales, aunque en estos casos suelen incluir un cuarto de baño, televisión, frigorífico y servicio de limpieza semanal.
Es el caso de uno de los anuncios consultados en el portal inmobiliario Idealista que ofrece habitaciones en la céntrica calle Mantería. No obstante, este servicio podría ser más cercano al de un establecimiento hostelero que al de un piso compartido. No obstante, en el mismo portal web hay habitaciones en viviendas también céntricas en el que se comparte piso con dos o más inquilinos que pueden alcanzar los 450 euros al mes. Por ejemplo en una vivienda en la calle Ruiz Hernández.
Un particular de una edad de "entre 50 y 60 años" ofrece una habitación en su hogar en la calle bajada de la Libertad por un precio de 500 euros, a lo que habría que sumar los gastos generales de la vivienda. Otras propuestas, un poco más económicas en el rango de habitaciones más caras de Valladolid, rozan los 400 euros en la calle Conde Ansúrez con baño compartido.
En el lado más barato de la balanza, existen opciones por 180 euros. Aunque en este caso solo sería para el mes de agosto (luego se incrementa hasta los 250) y la oferta se limita al género femenino. El piso en cuestión es en la zona de la Circular. El rango más barato suele ser aproximadamente de 250-270 euros como las habitaciones disponibles en Profesor Adolfo Miaja de la Muela o en la calle Dos de Mayo. En otros portales, como pisocompartido.com, se pueden encontrar alternativas incluso más accesibles. Como una habitación individual por 180 euros al mes en la plaza de las Batallas, a lo que habrá que sumar gastos de agua, luz y gas (unos 50 euros más).
Aunque aún resta más de un mes para el inicio de las clases universitarias, los estudiantes ya buscan su acomodo y muchos ya cuentan con habitación compartida. Los más rezagados tienen que darse prisa sino quieren verse en el comienzo del curso, compuestos y sin piso.
