El Recoletas Atlético Valladolid continúa con paso firme en la pretemporada y hoy se enfrentó a un coloso del balonmano internacional como el Al Ahly egipcio, campeón de África, que disputará en octubre la Super Globe (Mundial de Clubes) y que acabó imponiéndose en Huerta del Rey con claridad merced a su calidad, recursos y profundidad de plantilla.
El choque fue de alto ritmo de juego y anotador y sirvió para que el Recoletas vaya carburando ante los mejores sparrings posibles como el cuadro de El Cairo, en esta pretemporada que cumple ya cuatro semanas desde su inicio. El entrenador del Recoletas, David Pisonero, siguió reservando al lateral brasileño Toledo y tampoco contó hoy con los juveniles de oro Herrero y Pisonero.
El equipo demostró carácter ante un rival de gran talento y capacidad física al que tuteó durante la primera parte. Los pucelanos con su rotación y momentos de buena defensa, exhibieron circulaciones rápidas, juego en transición y facilidad para encontrar al pivote. A pesar de ello, en el segundo periodo se vieron desbordados por la defensa egipcia y la espectacular contundencia y eficacia de su primera línea, su juego en los 6 metros y la velocidad de sus extremos.
Iniciado el choque y con gran efectividad de los extremos D´Antino y Camino, los gladiadores azules se marcharon de cuatro. Al Ahly ajustó su 6:0 y recuperó varios balones que le permitieron anotar en transición y desde el lateral derecho darle la vuelta al partido con un gol de Lasheen, para aumentar la distancia hasta el 16-19 a falta de tres minutos con tanto obra de Hahmed Esham. Recoletas intentó que la cosa no fuera más allá y el portero Nico García hizo un par de buenas intervenciones que evitó que los egipcios se escaparan, para llegar 19-21 al descanso.
En el segundo tiempo el Al Ahly mostró todo su potencial. Defensivamente muy sólido, castigaba al contraataque cada pérdida del Recoletas. Además en estático, apoyado en la gran dirección de Khairi Ahmed, los inagotables recursos de su primera línea decantaban la balanza. El marcador se disparó con siete tantos a favor del cuadro de El Cairo en un abrir y cerrar de ojos, ya que ni siquiera la presencia en pista del guardameta Lamariano mermaba su potencial anotador.
Dos goles de Petter reducían la distancia a cinco tantos pero fue un espejismo, ya que de ahí se pasó al 28-35 min.46, diferencia que el equipo del vallisoletano Dani Gordo mantuvo sin excesivo problema llegando a los 40 goles a falta de cinco minutos para la conclusión. Poco después logró alcanzar los nueve de renta 32-41, su máxima de todo el choque, para finalmente apuntarse el triunfo sin sufrir por 36-43.