¿Conoces el origen de las fiestas y ferias de Valladolid? ¿Sabes por qué celebran los vallisoletanos sus fiestas a primeros de septiembre? Te contamos la historia de una patrona con mucha historia, la Virgen de San Lorenzo.
El 8 de septiembre es un día muy importante para todos los vallisoletanos, señalado en rojo en su calendario, es el día de la Virgen de San Lorenzo. Valladolid se llena de vida durante casi diez días en honor a su patrona. Si a lo largo del año hay una fecha en la que uno debe acercarse a orillas del Pisuerga es esta porque se puede disfrutar de las casetas, desfiles, conciertos, obras de teatro y diversas actividades para los niños y no tan niños.
Cuando desde el balcón del Ayuntamiento, el pregonero ofrece su discurso a todos los asistentes y se lanzan los fuegos artificiales, se da comienzo a la semana más esperada del año por los pucelanos.
Aunque durante mucho tiempo se celebraron en torno a San Mateo; en concreto hasta el año 2000, cuando el por entonces alcalde de la ciudad, Francisco Javier León de la Riva, propuso el salto hacia atrás en el calendario en busca de jornadas que se presumían más cálidas y con menos riesgo de lluvia, lo que trajo un cambio para honrar a la Virgen de San Lorenzo.
Según cuentan las historias entre el siglo XI y XII un hombre religioso con procedencia de Consuegra, Toledo, venía huyendo de los musulmanes con la Virgen a su lado. El decidió esconderla en una cueva muy cerca de la puerta entonces llamada la 'Puerta de Aguadores' a orillas del río Pisuerga. Tras el paso de los años un pastor encontró la imagen y se consideró como un milagro. En ese momento se convirtió en la Virgen de los Aguadores. Durante varios años se mantuvo en ese mismo sitio y siempre fue relacionada con el agua, por ello que siempre se le pide ayuda en casos de inundaciones, sequías o cualquier problema relacionado con el agua.
Después de algunos años se decidió moverla a una pequeña ermita que estaba dedicada a San Lorenzo, lo que produjo un aumento en el número de devotos y su fama milagrosa. Por este motivo se decidió construir una iglesia donde pudiera ser venerada por todos sus seguidores.
En 1916 fue finalmente proclamada patrona de Valladolid. Su fiesta se fijó para el día 8 de septiembre, aunque los festejos duran una decesa de días. Junto con las procesiones de Semana Santa, es el festejo más importante del año.
Durante su día se realiza una procesión desde su iglesia hasta la Catedral, después de una misa en la catedral se regresa al templo pasando por una alfombra artística de flores que cada año se diseña por un artista diferente.
Es una fiesta que vale la pena vivir y disfrutar, es muy recomendable debido al gran despliegue de actividades que puedes encontrar. Es la fiesta más grande de la ciudad que disfrutan muchísimo tanto grandes como pequeños, aunque como ya hemos contado no siempre han sido estas las fiestas que se celebraran.
Las fiestas en honor a San Mateo fueron las principales de Valladolid durante décadas, desde que en 1959 el Pleno del Ayuntamiento aprobase su inicio el tercer domingo de septiembre (aunque antes se celebraban sin fecha estable). A principios de los 2000 se decidió que estos festejos comenzaran el primer viernes del mes y con el paso del tiempo pasaron a ser tal y como los conocemos hoy en día.
El tiempo, más agradable a principios de mes, fue la principal de las decisiones como ya reclamó un grupo de comerciantes en 1910 aunque entonces la petición no prosperó, según recoge el Ayuntamiento. El paso del tiempo ha hecho que las fiestas de Valladolid hayan ido cambiando y que sean conocidas en toda España como una de las mejores gracias a sus conciertos internacionales o récord guinness.
