Teresa Sánchez
Viernes, 16, Septiembre, 2022
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virgina Barcones, sostuvo hoy que todas las denuncias por un posible pinchazo de sumisión química realizas este verano en la Comunidad, en torno a una veintena, han dado negativo posteriormente en la serología y en los análisis de sangre.
Durante la toma de posesión del nuevo jefe de la Comisaría Provincial de la Policía Nacional en Valladolid, Francisco Oterino, Barcones recordó que ante la "inquietud" generada este verano con los casos que se sucedían en España y que "hacía peligrar un derecho fundamental de las mujeres como es la libertad", se articuló con todas las administraciones y agentes afectados, de forma coordinada, un plan que se puso en marcha a partir de Sonoroma, en Aranda de Duero. "Creemos que funcionó bien", recordó la delegada, quien enumeró que estaban en la calle más agentes de paisano en este tipo de eventos, escenario reforzado con controles exhaustivos en la entrada para detectar instrumentos para cometer este delito.
En todo caso, aseguró que es preferible "atender cien actuaciones" de mujeres que creen que han podido sufrir este tipo de agresión, y que posteriormente "den negativo", a que una sola mujer "no lo denuncie por tener dudas o incertidumbre y que haya un sujeto agrediendo a mujeres. Seguiremos con todos los protocolos para evitar este tipo de actos", avanzó.
Por último, advirtió a quien tenga intención de "generar el pánico o inseguridad" en conciertos o discotecas de que "esto no es una broma, es un delito. Pinchar a una mujer, aunque no se inyecte ningún producto para hacerla creer que está siendo víctima, es un delito", insistió, justo antes de mostrar unos tapavasos, en el marco de una campaña para detener este tipo de violencia, para colocar sobre la bebida y evitar que alguien pueda añadir alguna sustancia. Deja un espacio en el medio para introducir una pajita. "Se trata de que las mujeres estén y se sientan seguras", concluyó.