El UEMC Real Valladolid Baloncesto ha conseguido este sábado la tercera victoria consecutiva tras perder en la primera jornada ante Palencia, circunstancia que no le permite estar colíder, ya que dos de sus rivales, el propio Palencia y Andorra, lo han ganado absolutamente todo. En esa condición también estaba un Lleida que ha cuajado su peor partido de la temporada hasta el momento y que, además, intentará olvidar rápido su actuación colectiva. Entre las dudas surgidas en el equipo catalán, el UEMC continuó con el mismo guion para llevarse una victoria que le coloca en tercera posición. Es decir, el mejor del resto.
El Pucela Basket comenzó el encuentro con la intensidad que requería desde el principio, ya que quería salir de Pisuerga con buenas sensaciones antes de visitar el WiZink, una pista siempre complicada para cualquiera. Por eso, incrementó su ventaja, la gestionó, no dejó opción a Lleida y mandó un claro mensaje de que, aunque el ascenso puede ser un sueño, la realidad parece que es muy distinta. Todo ello también gracias a la aportación del grupo, al buen hacer de jugadores como Kevin Allen, que empieza a reaccionar, de Mike Torres y de un Melwin Pantzar, que si sigue así, podrá tener la oportunidad de jugar en un equipo ACB.
Además, antes de que el marcador ya mostrara unas diferencias insalvables, Lleida sufrió las expulsiones de Michael Carrera, al filo del descanso, y de Juani Marcos, en el tercer cuarto, que condicionó la pizarra de un Gerard Encuentra, desesperado por momentos con el arbitraje y por la situación que veía en pista, ya que ir perdiendo por más de 40 puntos es algo que llega incluso a la humillación. Pisuerga eso lo veía y empezó a disfrutar de los suyos sin mirar tanto al marcador, aunque es consciente de que queda todavía toda la temporada por delante y puede tratarse de un caso excepcional.
Con todo y con ello y con el partido ante Estudiantes en el horizonte, el equipo de Paco García sigue solventando su complicado calendario con actuaciones de equipo que no solo aspira al playoff sino a ese deseado ascenso, algo que ilusiona a un polideportivo que se puso en pie para despedir a los suyos tras la victoria (97-57).
