Victoria sufrida, pero victoria. Y cuatro puntos que mantienen al VRAC en la pomada clasificatoria y con un balance, en seis jornadas, de cinco victorias, superado un exige tramo de competición que ha llevado al Entrepinares a medirse a varios de los favoritos a situarse en la zona alta de la clasificación. No fue fácil derrocar la defensa del Barça Rugby, intensa y efectiva, que impidió a los vallisoletanos perforar zona de marca hasta el minuto 54.
Comenzó el partido con un Barça Rugbi valiente que con un buen trabajo de delantera metió al VRAC en su propia veintidós. Allí apretó para conseguir un primer ensayo tras varias fases de empuje que posó Tomás Leonori (0-5), sin transformación del experto pateador Bautista Guemes. Otro buen pie, el de Javi López, remontaría el resultado en 15 minutos gracias a dos indisciplinas visitantes que Javi cobró con facilidad entre palos. Entre patada y patada, el VRAC desechó la opción de otro puntapié para buscar una marca que se le resistía. Tanto, que a la media hora de juego no había estrenado su casillero de ensayos, lo cual le llevó a ser productivo y aceptar las opciones que tuvo para sumar de tres en tres. Así, el marcador reflejaba en el minuto 30 un 9-5 con Javi López como autor de todos los puntos queseros.
El VRAC insistió con jugadas combinativas, pero de poca claridad, y el rigor defensivo del Barça abortaba todas las voluntariosas intentonas del Quesos. Los barceloneses apenas pasaron de la línea del centro del campo, hasta que en la última acción de la primera parte intentaron repetir el arranque. Ya en zona de marca, el árbitro Alfonso Mirat señaló injugable y decretó el tiempo de descanso.
No empezó el segundo tiempo muy diferente a como terminó el primero. La diferencia fue el Barça se desquitó de la ocasión fallida sobre la bocina y, a los tres minutos de la reanudación, sí ensayó por medio de Gerson Ortiz tras armar un buen maul. Los visitantes consumaban la gran mayoría de sus ataques, mientras que el VRAC no rascaba más que castigos. Así fue, nuevamente, tras una sucesión de acciones ofensivas que terminaron con un puntapié de Javi para el 12-10.
El Entrepinares se armó de paciencia para lograr su primera marca del duelo. Ayudado también por los movimientos de Diego Merino, que refrescaron fuerzas en el XV, un buen e insistente ataque acabó con el VRAC forzando a la defensa del Barça sobre la misma línea de marca. Ahí decidió la entrega de Gavidi, que echó el resto para posar y, con el pie de López, elevar la ventaja azulona al 19-10. Pero quedaba mucho partido. Tanto como 26 minutos que obligaban al Quesos a no relajarse. La inercia del marcador llevó a los de Merino a dar un paso atrás y el Barça recogió el testigo del juego ofensivo, lo que les dio tres puntos más a falta de 15 minutos, reduciendo las diferencias a los seis puntos. El VRAC se la jugó a armarse defensivamente y, pese a quedarse con un jugador menos en los momentos clave, apretó los dientes y aguantó el 19-13 con el que finalizó el partido.
