'As bestas', el thriller rural de Rodrigo Sorogoyen, se ha alzado como la gran vencedora de la 37 edición de unos Goya marcados por la estrella ausente de Carlos Saura, Goya de Honor póstumo, y que han celebrado un cambio de ciclo en el cine español, con más diversidad y calidad que nunca.
La película de Sorogoyen, que habla de xenofobia y de violencia y está inspirada en hechos ocurridos en 2010 en una aldea gallega, ha sumado nueve premios, incluidos el de mejor película, dirección, guion original, montaje, sonido, dirección de fotografía y música original.
También sus actores, el francés Denis Menochet y Luis Zahera, se han llevado los Goya a mejor actor protagonista y de reparto, respectivamente. Menochet, primer no hisoanohablante en triunfar en esta categoría, ha definido 'As bestas' como "un canto al amor de las mujeres frente la locura de los hombres".
Durante más de media gala, que ha tenido lugar en el Auditorio Andalucía de Sevilla, 'Modelo 77', el thriller carcelario de Alberto Rodríguez, le pisaba los talones a Sorogoyen, pero finalmente se frenó en cinco categorías técnicas: dirección de producción, diseño de vestuario, efectos especiales, maquillaje y peluquería y dirección de arte.
'Cinco lobitos', la crónica sobre la maternidad sin artificios de Alauda Ruiz de Azúa, se ha confirmado como la gran sorpresa del año con los premios a mejor dirección novel, mejor actriz protagonista, para Laia Costa y mejor actriz de reparto, Susi Sánchez.
En cambio 'Alcarrás', de Carla Simón, que sumaba once nominaciones y venía con el aval del Oso de Oro de Berlín, fue la gran perdedora de una de las ediciones más reñidas que se recuerdan y con reivindicaciones de todo tipo, como la defensa de la sanidad pública o de los montes la solidaridad con las mujeres en Irán o el fin de todas las guerras.
Isaki Lacuesta e Isa Campo se han llevado el Goya a mejor guion adaptado por 'Un año, una noche', película basada en la novela de Ramón Campos que narraba cómo este superviviente de los atentados de la sala Bataclán, en París en 2015, hizo frente al estrés postraumático.
También alzaron sus voces el ganador del Goya al mejor actor revelación, Telmo Irureta, aquejado de una parálisis cerebral y que abogó "por un cine más inclusivo" y Laura Galán, mejor actriz revelación por 'Cerdita', que se lo dedicó a quienes sufren acoso, como su personaje, a causa de su físico.
'Unicorn Wars' de Alberto Vázquez se fue a casa con el Goya a la mejor película de animación y 'Labordeta, un hombre sin más', de Gaizka Urresti, dedicado al político aragonés José Antonio Labordeta, el de mejor documental, mientras que el Goya a mejor película iberoamericana cumplió con los pronósticos y fue para 'Argentina 1985'.
La muerte el viernes, a los 91 años, de Carlos Saura, Goya de Honor 2023, obligó a la Academia de Cine presidida por Fernando Méndez-Leite a introducir cambios de última hora en el guion de la gala, que arrancó con la entrega de este galardón en homenaje al gran cineasta aragonés.
Fue un arranque lleno de emoción, con la presencia en el escenario de su pareja de los últimos 30 años, la actriz Eulalia Ramón, y los hijos del director, Antonio y Anna Saura. La encargada de ponerlo en sus manos fue Carmen Maura, protagonista de '¡Ay Carmela!'.
Ramón leyó un mensaje que dejó escrito Saura, pero antes dedicó unas palabras de agradecimiento a los sanitarios que les han acompañado y fue la primera en hacer un llamamiento en defensa de la sanidad pública: "Se merece que la cuidemos tal y como su personal nos cuida a nosotros", dijo.
En sus últimas palabras, Saura decía sentirse "feliz" de haber dado inspiración a la "brillante" generación actual de cineastas y afirmaba verse esta noche "como una estrella errante en la inmensidad del cosmos".
"La imaginación es más rápida que la velocidad de la luz", dejó escrito en su mensaje el que decía también sentirse afortunado por haber rodado más de 50 películas y haber tenido siete hijos, varios nietos y una bisnieta, traspasando los sueños que había tenido de joven.
Antonio Saura recordó la importancia de las cuatro mujeres de la vida de Saura: su madre, Adela Medrano, la actriz Gerladine Chaplin, que le acompañó en su etapa "más autoral" de su vida, Mercedes Pérez y Eulalia Ramón "que le ha ayudado en su viaje hacia el minimalismo y a superar miedos".
Y Anna Saura, la más pequeña de los siete hijos del director, destacó, en medio de una ovación del público, que su mayor enseñanza fue "que la cultura es lo más importante que tenemos y que tenemos que potenciarla".
Hasta Juliette Binoche, la otra gran homenajeada de la noche, al recibir el Goya Internacional, se rindió al maestro Saura tarareando "Porque te vas" de Jeanette, un guiño a la banda sonora de 'Cría cuervos', una película que vio de niña, ha dicho, y le marcó profundamente.
Méndez-Leite sacó pecho por el gran momento del cine español que vive, dijo, "un cambio de ciclo que ha supuesto el respeto del público" y anunció la creación de un nuevo premio Elías Querejeta, en homenaje al productor que abrió más puertas al cine independiente.
Con una fotografía de Carlos Saura de fondo, los Goya arrancaron con Manuel Carrasco cantando una versión de "Cantares" de Joan Manel Serrat, acompañado de los presentadores Antonio de la Torre y Clara Lago y de actores como Mirian Díaz Aroca, Maribel Verdú, Toni Acosta, Amaia Salamanca o David Verdaguer.
También hubo actuaciones musicales de Israel Fernández y Pablo López, Guitarricadelafuente y Bely Basarte, que acompañaron el "In memoriam"