Mercedes Cantalapiedra quiere convertirse en el "comodín del público" en el Ayuntamiento de Valladolid, tras quedarse sin cartera en el nuevo organigrama municipal, donde Carnero ha preferido que la número dos de los populares, que encabeza la lista al Congreso, se centre en su labor como diputada nacional.
A pesar de que la propia Cantalapiedra ha reconocido que los dos cargos podrían ser "compatibles", pero que el Congreso "exige" estar cuatro o cinco días a la semana fuera de Valladolid y no podría atender responsabilidades mayores en el Ayuntamiento. A pesar de ello, Cantalapiedra se queda en la corporación y no renuncia a su acta como concejal dispuesta a convertirse "en el comodín del público".
"Creo que conozco un poco el Ayuntamiento de Valladolid, conozco un poco la ciudad y cuáles son sus necesidades de los ciudadanos y en ese sentido yo me ofrezco tanto a los vallisoletanos como a todos mis compañeros en el Ayuntamiento para estar a su disposición en todo aquello que necesiten".