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Castilla y León ha registrado a lo largo de 2022 un total de 31.390 defunciones (5.905 hombres y 15.845 mujeres), con un aumento del 5,9 por ciento, frente a una subida nacional del 2,7 por ciento, hasta las 463.133. Las principales causas de los obituarios fueron las enfermedades del sistema circulatorio y los tumores, con 8.003 muertes y un descenso del 0,9 por ciento respecto al ejercicio anterior, y 7.513, con una subida del 1,6 por ciento, respectivamente. Estas dolencias fueron responsables del 25,5 y 23,9 por ciento de los fallecimientos en Castilla y León, en cada caso.
La 'Estadísticas de defunciones según causa de muerte. Año 2022' recogida por Ical, concretan que la insuficiencia cardíaca se llevó por delante a 1.465 castellanos y leoneses, un 2,2 por ciento más que el año anterior; las enfermedades inquémicas hipertensivas mataron a 1.179 personas, con un aumento del 7,9 por ciento; y otras enfermedades del corazón acabaron con 1.547, con una merma del 2,3 por ciento.
Dentro de los tumores, cabe destacar el maligno de la tráquea, de los bronquios y del pulmón, con 1.385 fallecidos y un avance del 4,8 por ciento; el de colon, con 780 muertes y una subida del 2,2 por ciento; y el de estómago, con 422 malogrados, aunque con un descenso del 0,7 por ciento.
Asimismo, los datos constatan 1.424 fallecidos por enfermedades endocrinas y metabólicas, con un aumento del 1,7 por ciento; con 1.032 muertes por diabetes mellitus, que mermaron un 4,3 por ciento.
Además, los trastornos mentales y del comportamiento estuvieron detrás de 1.293 fallecidos, un 13,9 por ciento más que en 2021; con 1.224 vinculados a trastornos mentales orgánicos, senil y presenil, que crecieron un 13,6 por ciento.
Las enfermedades de sistema nervioso y de los órganos de los sentidos fueron la causa de 1.557 fallecimientos, y crecieron un 8,7 por ciento. En cuanto a las dolencias del sistema digestivo, mataron a 1.651 personas, con un crecimiento del 5,7 por ciento. Además, las enfermedades del sistema genitourinario estuvieron detrás del fallecimiento de 1.178 ciudadanos, un 14,3 por ciento por encima del dato de 2021.
Por último, destacar que las causas externas de mortalidad mataron a 1.417 personas, un 19,7 por ciento más que el año anterior. Al respecto, destacar que 246 castellanos y leoneses se quitaron la vida, un 3,4 por ciento más, y 346 perdieron la vida por ahogamiento, sumersión o sofocación accidental, con un crecimiento del 31,6 por ciento.
El estudio del INE destaca que los fallecidos por COVID confirmado en la Comunidad sumaron 2.751 personas, lo que representa un crecimiento del cuatro por ciento en relación a 2021, cuando en España ascendieron a 31.559, un 20 por ciento menos que el año anterior.
En concreto, el virus se siguió cebando con la población de mayor edad, con 2.539 personas muertas con 70 y más años. En este sentido, cabe destacar los 672 fallecidos con entre 90 y 94 años, y los 664 con entre 85 y 89.
Por provincias, el número de fallecidos creció más en Salamanca (4.566), un 9,6 por ciento; en Burgos (4.349), un 8,7 por ciento; en Zamora (2.703), un 8,6 por ciento; y en Ávila (2.138), un 8,2 por ciento. Asimismo, se elevó en León (6.725), un 6,4 por ciento; en Soria (1.266), un seis por ciento; en Segovia (1.758), un 4,3 por ciento; y en Palencia (2216) y Valladolid (5.669), un uno por ciento en ambos casos.