Muchos españoles y, por supuesto, muchos vallisoletanos, preparan en estos días sus vacaciones aprovechando el verano. Son muchos los que elijen el coche para desplazarse hasta su lugar de descanso y, en esos trayectos largos, siempre tiene que acompañar la prudencia al volante, el cumplimiento de las normas y la preparación previa del desplazamiento, donde la puesta en marcha del vehículo se hace fundamental.
Si bien, el mantenimiento del utilitario debe hacerse de forma anual y regular, hay que tener claro antes de un viaje largo cuáles son los principales puntos de control que no se pueden pasar por alto.
Tal y como indica el presidente de la Asociación de Talleres de Automoción de Valladolid (ATRAVA), Ángel Raimundo, "antes de hacer un largo viaje, sobre todo en la época vacacional, que hagan una revisión". En estas revisiones, los profesionales comprueban "125 puntos de control, como mínimo", apunta Raimundo. Un chequeo completo al coche que es "prácticamente gratuito" y que sirve para salir a la carretera de que no se nos ha quedado nada en el tintero, ya que al conductor habitual siempre hay detalles que se le pueden escapar. "Cualquier cosa, como puede ser una lámpara, que uno cree que lo tiene bien y, sin embargo, falta algo", afirma.
De esos 125 puntos de control, Raimundo destaca los imprescindibles: "Los frenos, las luces, que parece que no, pero son muy importantes, y la suspensión".
Además, no hay que olvidar el equipamiento necesario en caso de emergencia. "Que lleven siempre chaleco en la puerta izquierda y derecha, para que no tengan que salir atrás en el maletero a coger el chaleco", recomienda Raimundo. "En ese momento que sales, puede venir alguien por detrás, antes de estar identificado, y darte un golpe", algo que, por desgracia, pasa "a menudo". Además, hay que tener "la luz que se pone encima del capó y los triángulos, que no queda más remedio que cogerlos atrás en el maletero, pero que cualquiera que se baje del coche, ya directamente con el chaleco puesto, y que salga, y que se retire del coche lo antes posible".
En este sentido, y como recomendación esencial de seguridad, el presidente de ATRAVA pone el énfasis en no hacer reparaciones en carretera o cambios de ruedas por el peligro que conlleva. "A ellos que no se les ocurra cambiarlo. Tienen un número de teléfono para llamar la asistencia en viaje, porque cualquiera que salga del coche y se ponga a colocar la rueda de repuesto, ya sea en una autopista, carretera general o convencional, se están exponiendo a que cualquiera que no le vea se lo lleve por delante", remarca. En esos casos, "en el coche se encienden las cuatro intermitencias y se sitúa rápidamente a un sitio que esté seguro, fuera, en el arcén, poner los triángulos después de ponerse el chaleco, importantísimo, y llamar a la grúa".
Conviene, en todo caso, hacer las revisiones periódicas al coche. "Yo aconsejo, que es además lo que se aconseja a todas las marcas, una vez al año se debe venir al taller, un poco antes de ir a la ITV, revisar todo", subraya. "Pero si se hace algún viaje largo, no cuesta nada llamar al taller, porque a lo mejor nueve meses antes los frenos estaban bien, pero según los kilómetros que tú hayas hecho, los frenos ya están gastados y sería conveniente mirarles un amortiguador que se ha roto en ese intervalo de tiempo", explica. "Cuando se va a hacer un viaje importante, sobre todo en época vacacional, hacerlo", completa.
