La joven promesa del flamenco pop Luis Cortés llega a Valladolid este domingo, 11 de noviembre, dispuesto a hacer bailar a su público en un concierto que tendrá lugar en la Sala Porta Caeli a las 20.00 horas.
"Quiero que todo el mundo esté entregado como me entrego yo en cada concierto y espero que quien asista al concierto disfrute y se olvide un poquito de todo lo malo que tiene la vida", asegura el artista en una entrevista con Tribuna Valladolid.
De etnia gitana y africana, llega dispuesto a revolucionar el panorama musical a sus 22 años y se erige como el artista revelación de los últimos meses tras arrasar con sus temas singulares y su estilo único.
Todavía "incrédulo" ante el reciente éxito de su música, explica que lo está llevando "muy bien" y que él y su equipo están "súper contentos" de recibir todo el apoyo de un público "que no para de crecer".
Su exitosa gira 'Dolores', que Cortés define como "una auténtica locura", está recorriendo el territorio español con "una gran acogida" que se traduce en la masiva venta de entradas de cada uno de los bolos.
Para el concierto de Valladolid, de este domingo, invita a que todo el mundo vaya con predisposición de "disfrutar" y con ganas de "cerrar los ojos y sentir".
Su último single 'Que me lleve al aire' ha superado los seis millones de reproducciones en plataformas como Spotify y cuenta con 1.4 millones de oyentes mensuales.
"Es una canción con la que la gente ha tenido mucha conexión. Todo el mundo ama a su personita y sabe a quién dedicarle este tema", expresa.
Ahora, trabaja en nueva música que verá la luz "más adelante". Un innovador trabajo que "va a sorprender" y con el que quiere "emocionar" a sus seguidores: "Va a ser un disco increíble que verá la luz muy pronto".
Nacido en el humilde barrio de Burjassot, Valencia, se encuentra "entregado" a sus vecinos, ayudando "en todo lo que se puede" a las víctimas afectadas por la DANA en las localidades cercanas a la capital valenciana.
Luis Cortés, "muy a favor" de los conciertos benéficos que van a celebrarse próximamente, sentencia que "la música tiene que estar del lado de la gente que sufre", invitando a todo el mundo a "echar una mano".
