Carnero entiende que el Ministerio asume "con su silencio" el aplazamiento de pagos a la Sociedad Valladolid Alta Velocidad

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha interpretado este miércoles, 13 de noviembre, como "silencio positivo" que el Ministerio de Transportes no haya contestado a su escrito sobre los pagos pendientes a la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV), aunque ha añadido que mediante una llamada el secretario de Estado de Transportes propuso un aplazamiento.

En declaraciones a los periodistas, Carnero ha insistido en que su intención es mantener el diálogo con el Ministerio en el seno de la Sociedad SVAV, aunque ha remarcado que él mantiene la posición de continuar con la idea del soterramiento de las vías del tren a su paso por Valladolid y que el Ayuntamiento no está incumpliendo con los pagos.

"No vamos a incumplir el convenio porque nosotros seguimos trabajando dentro del convenio actualmente vigente, lo que si que queremos es modificar ese convenio", ha resumido el alcalde.

Carnero ha reconocido que ayer se produjo una llamada del secretario de Estado de Transportes y Movilidad, José Antonio Santano, para proponer algo que el Ayuntamiento entiende que ya se ha producido por el "silencio positivo", como es el "aplazamiento de los 11 millones" que debe abonar para cumplir con sus aportaciones de 2024 a la Sociedad.

Sobre la necesidad de continuar con el despliegue de los pasos inferiores proyectados por el anterior Equipo de Gobierno dentro del esquema de la integración ferroviaria, Carnero ha distinguido entre unas obras y otras.

"Unas tienen un avance, otras tienen otro avance. Las que no tienen tanto avance, entre otras cosas, no tienen por imposibilidad material, porque no podemos, en el caso de Ariza, llevar a cabo ahora ningún tipo de licitación, en tanto en cuanto no se desmantele la actual vía de tren", ha argumentado.

Además, ha afirmado que esa obra generaría un "trastorno" a la empresa Renault y a la ciudad de Valladolid, por lo que ha añadido que irán "trabajando tranquilamente", pero con el "mandato" de soterrar la vía del tren: "Ahí nos vamos a mover".