El Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León resaltó la "tarea educativa" en la Comunidad para rebajar el uso de antibióticos un 7,5% a lo largo del año próximo, parámetro que se ha propuesto la Comunidad para 2025, en comparación con los niveles de 2022, como medida para frenar el avance de la resistencia antimicrobiana. Esta meta está enmarcada en el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN), que ha mostrado avances a nivel nacional, logrando una reducción general en el uso de estos medicamentos desde su implementación en 2014.
El órgano colegial remarca la capacidad y el valor educador de los profesionales de la enfermería en la tarea conjunta de la sociedad para promover el uso adecuado de los antibióticos. "Un asunto de gran importancia sanitaria en el que las enfermeras y enfermeros de esta comunidad autónoma desempeñan un papel fundamental", manifestó el presidente de esta entidad, Enrique Ruiz Forner, en este Día Europeo de Concienciación sobre el Uso de los Antibióticos, que se conmemora el 18 de noviembre, y busca concienciar sobre los peligros de la resistencia antimicrobiana, un problema de salud pública creciente tanto en Castilla y León como en el resto de España.
En Castilla y León, el consumo de antibióticos ha disminuido de manera significativa en los últimos años, con una reducción importante en la prescripción, si bien se ha registrado un repunte a lo largo del año pasado. En 2017 se registraron 26,55 dosis diarias de antibióticos por cada mil habitantes, mientras que en 2020 esta cifra había caído a 19,8, dosis diarias, un volumen que seguía siendo ligeramente superior a la media nacional.
Además, la Comunidad ha pasado de prescribir 1,84 millones de envases en 2017 a 1,22 millones en 2021. En Castilla y León, el consumo de antibióticos ha experimentado una ligera reducción en los últimos años, aunque se mantiene por encima de la media nacional en ciertas zonas, como León, según el Plan de Optimización del Uso de los Antibióticos (PROA) de la región.
El incremento de consumo en años recientes, atribuible en parte al repunte de infecciones respiratorias tras la pandemia, destaca la necesidad de mantener las campañas de concienciación y educación entre la población, lo cual subraya la importancia de la tarea educadora de las enfermeras, recuerda el Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León para la promoción del uso responsable de antibióticos.
"El trabajo educativo de las enfermeras y enfermeros es esencial en la lucha contra la resistencia antimicrobiana. Son quienes están en primera línea de la atención sanitaria y pueden informar a los pacientes sobre el uso adecuado de los antibióticos, ayudando a prevenir problemas como la automedicación y el abandono de tratamientos", apuntó Ruiz Forner.
A su juicio, "es fundamental" aunar esfuerzos para "evitar el mal uso de los antibióticos y proteger su eficacia para el futuro". "La enfermería está preparada para liderar esta campaña, pero necesitamos el apoyo de todos los sectores para que este mensaje llegue a cada rincón de nuestra Comunidad", subrayó.
El Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León reafirmó de esta forma su permanente compromiso con la salud pública y destacó el "papel proactivo" de las enfermeras en la prevención de riesgos sanitarios. "La enfermería demuestra una vez más su relevancia como pilar esencial en la protección de la salud y el bienestar de la comunidad", aseguró su presidente.
