El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, afirmó este viernes, tras su reunión con Pedro Sánchez, que sale de La Moncloa sin compromisos a la batería de proyectos y propuestas presentadas, aunque confió en que se concreten en los encuentros sectoriales que a partir de enero celebrarán con los ministros con los consejeros.
Fernández Mañueco explicó, tras una hora y media de reunión con Sánchez, que acudió con una posición constructiva pero sobre todo reivindicativa ante las materias pendientes en Castilla y León, algunas de ellas durante muchos años, a la vez que se quejó de trato "injusto" y de que se haya "marginado" a la Comunidad en materias, como ayudas al campo, con aportaciones integras de la Junta, publica Ical.
"Me voy sin compromisos concretos, nos hemos emplazado a concretar los proyectos con los ministros, voy a ser super exigente, son proyectos vitales para mi tierra", resumió Fernández Mañueco esta segunda reunión con el presidente del Gobierno, después del primer encuentro en julio de 2022.
En su carpeta, en la que se podía leer 'futuro Castilla y León', planteó que se agilicen proyectos en infraestructuras viarias, de transporte, de comunicación, de digitalización, en el desarrollo económico y en la apuesta por el campo.
Reconoció el presidente que "hablaron un poco" de financiación, donde es conocida su posición de que se acuerde de manera multilateral en una negociación entre todos y su rechazo al denominado cupo catalán, pero recordó que ese es un asunto que se abordará en la próxima Conferencia de Presidentes, prevista para el 13 de diciembre en Cantabria.
"He venido a hablar de Castilla y León", aseveró el presidente de la Junta, que lamentó la salida sin compromisos, ya que Pedro Sánchez va a trasladar a los ministros las propuestas recibidas para mantener reuniones sectoriales con los consejeros a partir de enero y febrero.
Fernández Mañueco remarcó su exigencia y reivindicación al Gobierno y se refirió al paquete fiscal, aprobado ayer en el Congreso, para afirmar que estarán "muy vigilantes" porque "parece que se puede consolidar" el reparto de los tributos a las comunidades por el PIB y no por el modelo de financiación, lo que rompería, en opinión de la Junta, la igualdad y solidaridad de los españoles. "Defenderemos los intereses de Castilla y León, empezado por los tribunales", apuntó.
En su agenda de reivindicaciones, demandó igual trato entre el Corredor Atlántico y Mediterráneo, "vital" para el cuadrante noroeste de España, y recordó los hasta quince proyectos pendientes en autovías y ferrocarriles, además de dejar en la mesa la petición del soterramiento de las vías del tren en las ciudades de Valladolid, León y Palencia.
El presidente de la Junta expresó su deseo de que el Gobierno "dé marcha atrás" en la posible supresión de 346 paradas de autobús que dejaría a "miles de personas sin conexión" en el transporte público por carretera, y confió en que tanto Sánchez como el ministro del ramo, Óscar Puente, atiendan esta petición de Castilla y León.
"La digitalización es indispensable", sentenció Fernández Mañueco, que descargó la responsabilidad y la competencia de la banda ancha y la tecnología 5G en el Gobierno, al que exigió la extensión en todo el territorio para apostar por vida, oportunidades y empresas en todos los rincones de la Comunidad.
También, prosigue Ical, aludió a la infraestructura energética, donde subrayó el liderazgo de Castilla y León en producción, pero demandó la mejora de la red eléctrica y flexibilizar la normativa para que la Comunidad no solo sea exportadora, sino que pueda utilizar esa energía en su consumo, como en los polos industriales.
Se mostró muy critico con el Plan Hidrológico del Duero porque "no responde" a las "necesidades" e "impide" el desarrollo y otras actividades básicas, para solicitar que se incremente la capacidad de regulación en la cuenca, más capacidad de almacenamiento para su aprovechamiento en nuevos regadíos y actividad económica, así como agilizar obras pendientes desde hace años o la limpieza de cauces para evitar inundaciones por crecida de las aguas.
En este punto, preguntado si se refería a lo ocurrido en Valencia y las obras en el barranco del Poyo, precisó que la limpieza de cauces es una medida, pero recordó que ha planteado un conjunto de ellas en relación con las infraestructuras hídricas. En relación a la Dana, indicó que "la naturaleza es incontrolable" y añadió que es partidario de un análisis profundo y sosegado para mejorar los protocolos y minimizar riesgos.
Fernández Mañueco pidió al presidente del Gobierno que se cumpla el mandato de la Comisión Europea que permite llegar al 20 por ciento en las ayudas al funcionamiento de empresas en Soria, Cuenca y Teruel y que esta medida se pueda extender a otros territorios despoblados, algo que se reclama desde la provincia de Zamora.
Se detuvo en el sector de la automoción para recordar que Castilla y León es líder en fabricación de vehículos y solicitar una acción coordinada con el sector a través de la mesa de la automoción, cuya convocatoria solicitó, siempre en línea de mejora de la competitividad, el empleo y la transición justa.
Fue en el apoyo al campo donde el presidente de la Junta se mostró más disgustado con el Gobierno, ya que habló de "menosprecio y marginación" a los agricultores y ganaderos de Castilla y León tanto en las ayudas a la sequía como a la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), en unas materias en las que aseguró que solo han contado con los fondos del Ejecutivo autonómico.
El presidente de la Junta manifestó que también reivindicó más profesionales sanitarios, una Ebau única, financiación a las universidades, más vivienda pública, aunque precisó que algunas de estas materias se van a tratar en la Conferencia de Presidentes.
Como resumen, insistió en que "Castilla y León no es más que nadie pero tampoco menos" y confió en que el Gobierno cumpla con la Comunidad, dado que advirtió que van a estar vigilantes y serán "super exigentes" para que se materialicen.
