El cierre del Congreso Federal del PSOE, con la reelección de Pedro Sánchez como líder indiscutido, abre ahora la puerta a los congresos autonómicos, que en el caso de Castilla y León depara como principal incógnita si las primarias enfrentarán o no al actual líder y previsible candidato a la reelección, Luis Tudanca, con una candidatura alternativa.
La pugna abierta entre las direcciones autonómica y federal a cuenta de los plazos de la convocatoria de las primarias y el congreso autonómico, que hubieran permitido a Tudanca llegar al Federal ya reelegido si únicamente él presentaba candidatura, ha situado a la federación de Castilla y León en el siempre denostado grupo de los 'críticos', aunque sin incidencia en el Congreso Federal que ha culminado este domingo.
Está por ver si, en los próximos días, la renovada Ejecutiva Federal del PSOE tiene interés en respaldar una candidatura alternativa a Tudanca en Castilla y León y también si alguien vinculado al PSOE en esta Comunidad da el paso para enfrentarse al actual líder autonómico, para lo que previsiblemente contaría con el apoyo del PSOE vallisoletano, con el ministro Óscar Puente a la cabeza, y con el secretario provincial del PSOE de León, Javier Alfonso Cendón, hoy reforzado al incorporarse a la Ejecutiva Federal.
Y es en este entorno donde fuentes socialistas apuntan que se pueda estar fraguando una potencial candidatura alternativa a la de Tudanca, con el alcalde de Soria, Carlos Martínez, y la ministra de Igualdad, la vallisoletana Ana Redondo, como algunos de los nombres más citados en las quinielas, pero con ambos negando por el momento ese paso.
De hecho, en el caso de Ana Redondo se da la circunstancia de que sale de la Ejecutiva Federal, lo que ha sido visto por algunos socialistas como un detalle que pudiera acercarla a dar el paso para esa candidatura en Castilla y León.
También está por despejar la incógnita sobre la posición que tomarán algunos otros secretarios provinciales después del Congreso Federal, que hasta ahora han mantenido una postura de respeto hacia el criterio fijado por la dirección federal, pese a considerar que la propuesta de calendario que salió del Comité Autonómico tenía legitimidad y cumplía con lo establecido por los estatutos del partido.
En estas disputas internas siempre hay daños colaterales y en las últimas semanas el Grupo Socialista en las Cortes de Castilla y León ha evidenciado que los posicionamientos de unos y otros integrantes tienen repercusión, con la actual viceportavoz, Patricia Gómez, como principal damnificada, pero con otros parlamentarios también señalados por su vinculación con el PSOE vallisoletano o Alfonso Cendón, como es el caso de Nuria Rubio. Cuestión de confianza o desconfianza.
Pero esa batalla, recrudecida por el intercambio de argumentos y críticas a través de los medios de comunicación, está ya superada y los contendientes se preparan ya para una disputa que puede alargarse durante casi meses.
Un tiempo que es visto con recelo por la actual Ejecutiva autonómica, ante la hipótesis de un adelanto electoral en Castilla y León por parte del presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco (PP), aunque en las últimas semanas esta opción parece haber perdido fuerza por las últimas encuestas que hablan de una recuperación de Vox.
Lo que está claro es que quien resulte elegido como secretario general del PSOE de Castilla y León quedará prácticamente investido como candidato socialista para aspirar a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, ya que haya o no adelanto electoral como máximo esos comicios se celebrarían en poco más de un año.
Tras la impugnación realizada por la Ejecutiva Federal al calendario de primarias y congreso aprobado por el Comité Autonómico, finalmente se firmó una tregua con la aprobación de nuevas fechas, que implican que las primarias se desarrollarán en caso de haber más de un candidato el 1 de febrero, mientras que el Congreso Autonómico se celebraría los días 22 y 23 de febrero en Palencia, la misma sede por la que había optado el PSCyL.
La recogida y presentación de avales de los candidatos tendrá lugar entre el 7 y el 17 de enero, mientras que la campaña de los aspirantes a dirigir el partido tendrá lugar del 22 al 31 de enero, en la víspera de la posible votación, que tendría una segunda vuelta el 8 de febrero en caso de que hubieran concurrido más de dos candidatos, algo que a día de hoy parece improbable.
